30 de septiembre de 2012

Siempre has estado dispuesto.

Siempre has estado dispuesto, pero nunca eras tú quien se acercaba. Siempre era yo quien andaba detrás de tus besos, besos que nunca has rechazado. No creo que sepas que me importas, tampoco he hecho nada por intentártelo demostrar; o quizás si pero no lo sepas.

Quiero que seas algo más, que estés más presente. Quiero no sentirme idiota cada vez que te escribo alguna tontería para poder retomar mínimamente el trato contigo. Quiero que te quieras y quiero quererte. Y te reías cuando te decía que quizás para la próxima vez que nos viésemos ya hubiera encontrado a alguien.

Quiero sentirte cerca. Que nos hablemos bajito, mirándonos a la cara, mientras estemos en la cama. Acurrucarme en ti. Quiero despertarme y sin abrir los ojos sonreír al saber que eres tu quien está a mi lado. Quiero dejar de imaginarte el resto de noches, en el resto de cuerpos. Quiero dejar constancia de que contigo las cosas me salen de dentro.

14 de septiembre de 2012

Resurrección.

Esto es algo así como: fin de una parte, una semana para desconectar y vuelta a empezar. No hay tiempo para más. Podría quejarme si no fuera porque una vocecita dentro de mi dice algo así como tú te lo guisas y tú te lo comes, así que ni derecho tienes para abrir la boca (o mover los dedos, en su defecto) para expresar la rabia que te puede llegar a producir esto.

No me quejo y procuro adoptar una postura de cierto optimismo al mirar hacia delante, y es que es en septiembre cuando empiezan los años y los nuevos propósitos más que en enero. Así que yo regreso a la vida y una lista en mi cabeza enumera las cosas en que hay que procurar cambiar. Ya va siendo hora de hacer las cosas bien.

¡Buenos días!


1. Circus Bar (Santander); 2. Some mornings; 3. Volviendo a la vida; 4. @kriispeke y @LasTeterasdeLui.