29 de noviembre de 2011

¿y ahora qué?

No lo superé, aún no lo he superado. Tan real como la vida misma. Y aquí sigo, estancada en medio del camino, las cosas como son.





Tengo miedo, miedo de que ahora todavía sea más difícil. De que me cueste aún más despegar. Miedo a que no vuelvas a aparecer.

28 de noviembre de 2011

Cavilaciones al regresar.

Reconozco que me dejé llevar por las ilusiones, y que por consiguiente, que llegara el desencanto, no era más que una cuestión de tiempo. Tenía muchas ilusiones puestas en estos días, como era más que obvio, y una tras otra se fueron desvaneciendo según fueron pasando los días. Estoy mal acostumbrada, quizás sea ese el problema.

No pedía tampoco grandes momentos, creo que me hubiese conformado incluso con pequeños detalles o acontecimientos. Pero ya se sabe, son cosas que no están en mi mano, que si tienen que pasar pasarán, y eso no siempre está garantizado. Sabía que iba a ser duro, que iba a ser complicado volver a revivir aquella fecha, y sí, dejo constancia de que lo fue. Hubo un día que lo fue especialmente, y que temo que en lo sucesivo siga siendo así. No quiero que haya un nombre escrito en una fecha que se supone que es importante para mí. Yo más susceptible que nunca, y una canción es suficiente para que me derrumbe y rompa a llorar. Son demasiados recuerdos bonitos los que tengo en mi mente, y el hecho de que no puedan volver se me clava constantemente por dentro.

Si surgiese la oportunidad me podría lanzar a empezar de cero, pero las oportunidades nunca llegan cuando las necesitas, y tienes que ser fuerte hasta que consideren oportuno aparecer.

El tiempo cada vez me parece más triste, y yo más miserable. Aunque ayer hubo quien me dijo que los Sagitario somos manipuladores yo creo que soy la más manipulable e influenciable de todos. Debe de ser divertido jugar conmigo o pasar el rato y yo aún no me he dado ni cuenta. ¡Que despiste el mío!

Necesito gas, y lo llevo necesitando desde hace tiempo.

Pero bueno, tristezas aparte también he de decir que aunque estos días no fuesen según lo esperado no me ha faltado una compañía bonita, de esa que si que merece la pena y que estoy deseando volver a ver. Gracias.


23 de noviembre de 2011

vamos a terminar como es debido.

Pretendía hacer un balance de como han sido mis 20 años, que están apunto de concluir en unos días, una gráfica con sus altibajos en estos doce meses, que empezaron con la máxima felicidad posible y que acaban... y que acaban, aún nadie sabe como.

De momento sólo os digo que mañana salgo para Madrid, por fin me vuelvo a reencontrar con esa ciudad. Sidonie y Mucho actuarán en el Circo Price. Se espera con ganas. Madrid siempre trae sorpresas.

Y aún tengo una maleta por hacer y un despertador que sonará a las seis de la mañana. Hay algunos días que no me cuesta madrugar, y aún despierta me sigo abrazando a los sueños, que aunque sé que no ocurrirán no se quieren separar de mi, ni yo de ellos.

Espero volver con no cientos, sino miles de sonrisas. Con buenos momentos. Y empezar bien los 21 cumpliendo mi nuevo propósito... "dejar que todo fluya".


Igual te quiero contar que aprendí a luchar.

14 de noviembre de 2011

te necesito.

Consecuencia de mis sueños desperté pensando en ti. Abril se quedó atrás, y desde entonces no te veo, tampoco te he buscado. Único capaz de bajarme al suelo sin que me duela, y lo sabes. ¡Aparece! Creo que te necesito.

Ha sido otra de esas historias en las que nunca ha habido nada, o eso es lo que quiero pensar, o si algo hubo nunca fue posible definirlo o delimitarlo. Pero era la piedra que se aparecía constantemente en el camino. Y reconozcámoslo, tanto tu como yo hemos tropezado varias veces.

Tengo ganas de verte, pero me conozco y sé que no te lo voy a decir. Es más, si te vuelvo a ver procuraré no mostrar siquiera interés, a menos que seas tu quien hable primero, quien fingiendo muestre interés al preguntarme sonriendo qué es de mi vida.

Dame la mano y vamos a darle la vuelta al mundo.

Vuélveme a ilusionar, como años atrás hiciste. Tú, que tienes esa capacidad. Aléjame del resto.
Lo necesito, te necesito.

13 de noviembre de 2011

Archivando...

En unas horas cogeré un bus que me devuelva nuevamente a Santander, la semana previa a un examen, tras un fin de semana, o más bien un viernes, que se podría decir que fue muy bonito, a pesar de la increíble resaca del día siguiente.

Vikxie y Perro Flaco actuaban en el Café Teatro, y muchas caras conocidas nos juntamos allí una noche más. Sin fotos, como de costumbre, pero con recuerdos que se intercalan entre copas, cervezas y canciones. Con ganas de repetir otra noche como esa.

El viernes que viene, de momento nos espera César Pop en el mismo lugar, y ya la noche dirá.


Y lo bonito de la música y de su gente siempre presente. No me extraña que sea tan difícil lograrse desenganchar. Viviría eternamente junto a ella. A pesar de todo. Para siempre.

Gracias a todas aquellas personas que hacen que noches como la de este viernes sean posibles, y tan geniales.

6 de noviembre de 2011

Contigo hasta el final.

"Y yo seguiré aquí a tu lado a pesar de lo raro que sea nuestro amor, este amor..."

Hay muy poca gente que lo entienda, o que lo quiera entender, y a mi me faltan las ganas y las palabras para poderlo explicar. Es un sentimiento demasiado grande como para que se pueda plasmar por escrito sin que se vea menguado.

Ojalá algún día lo podáis comprender, porque es de lo más bonito que existe. Ojalá.

Y yo ya le he sacado mi sentido particular a esta canción.




"Voy a contagiar a esta ciudad con nuestro amor que todos miran mal. Fue la canción la enfermedad..."


"Fue mi decisión. No hay dolor."