14 de noviembre de 2011

te necesito.

Consecuencia de mis sueños desperté pensando en ti. Abril se quedó atrás, y desde entonces no te veo, tampoco te he buscado. Único capaz de bajarme al suelo sin que me duela, y lo sabes. ¡Aparece! Creo que te necesito.

Ha sido otra de esas historias en las que nunca ha habido nada, o eso es lo que quiero pensar, o si algo hubo nunca fue posible definirlo o delimitarlo. Pero era la piedra que se aparecía constantemente en el camino. Y reconozcámoslo, tanto tu como yo hemos tropezado varias veces.

Tengo ganas de verte, pero me conozco y sé que no te lo voy a decir. Es más, si te vuelvo a ver procuraré no mostrar siquiera interés, a menos que seas tu quien hable primero, quien fingiendo muestre interés al preguntarme sonriendo qué es de mi vida.

Dame la mano y vamos a darle la vuelta al mundo.

Vuélveme a ilusionar, como años atrás hiciste. Tú, que tienes esa capacidad. Aléjame del resto.
Lo necesito, te necesito.

1 comentario:

Noe dijo...

dioooss miooo! mee encanttaa q lo sepas! :)
te veo x mi blog!un besazo!